palabra tras
palabra,
alicatadas,
encadenadas,
jaulas para
apresarte.
Red de
sentimientos
que se
viertan sobre tu piel morena
y se
deslicen en cascada
de emociones
sobre tus senos,
despeñándose
abdomen
abajo en caída libre,
invitando a
mis labios a
beber del
cáliz de la vida
un palmo por
debajo de tu ombligo.
Quedando
atrapada
en la cárcel
de tus deseos.
Cazador
cazado
sedienta
de los besos
,
de tu sexo
que se abre
a mis labios
cual tierna
flor
destilando
rocío de lujuria.
Puedo
construir un castillo
de amor con
mis palabras
Y
encerrarnos en sus mazmorras
hasta saciar
una y otra vez
nuestra sed
de deseos .