El amor
nos espera detrás de cada puerta,
bajo cada
mueble,
dentro
de cada estancia,
nos
espera
en el
calor que despiden nuestros cuerpos,
en la
tesura de los senos,
en los
cientos de insectos
un
palmo por debajo de la cintura,
en la
voracidad de mi boca
por la
fruta prohibida
que
escondes bajo el ecuador de tú anatomía,
en mis
ansias por cabalgarte
hasta
que mi sexo fundido con el tuyo
haga
desatar los espasmos de placer
que
sólo tú provocas,
el amor
está en cada cosa,
en cada
espacio, en cada beso.