En tú
próxima visita
te
invitare a mi cama
y sobre
sus sábanas
quiero
escribir un diario,
para
ello,
dejaré
que en ellas quede impresa
tu imagen,
el olor
que despides,
cada
una de las manchas
que van
dejando las ambrosias
que la
pasión hace brotar
del
fuego que cubre el lecho
de
punta a punta.
En tú
próxima visita
quiero
beber cada trozo de ti
hasta
tener la certeza
de
saciar mí sed
sin
importar el tiempo,
en tú
próxima visita
quiero
desatar mi lujuria,
para
que te quedes.